Como sabemos, el coaching es la herramienta que utiliza diferentes métodos para mejorar la calidad de vida del coachee a través de la toma de conciencia y la reflexión alrededor de su vida; pero también, debemos tener en cuenta que existen tantas formas de coaching como áreas en las que nos desarrollamos.
Acá te mostramos cuáles son.
No toda la disciplina del coaching es igual porque no todos los objetivos y formas de trabajo son iguales aunque si quisiéramos englobar a todos los diferentes tipos de coaching podríamos definirlos como coaching ontológico; ya que no importa qué objetivo tengas, todos van a girar en torno a lograr cambios en tu vida.
En principio los coaches pueden llevar a cabo procesos dirigidos a alcanzar cualquier objetivo, ya que él no es ni un consejero ni un mentor; los coaches no necesitan tener experiencia ni conocimiento en el área en que desea desarrollarse su cliente.
Los coaches necesitan dominar las herramientas de desarrollo y toma de decisiones necesarias para acompañar a su cliente hacia la consecución de sus objetivos; el coaching ontológico propicia el análisis de la diferencia entre tu estado actual y tu estado deseado, y cubrir los huecos y carencias.
Y si bien el coaching ontológico es una herramienta básica que ayuda a cumplir tus objetivos, sin importar cuál sea; algunos coaches terminan centrando su tarea en un terreno específico, donde van ganando experiencia y conocimiento.
¿Cuales son los tipos de coaching más frecuentes?
- Coaching Personal es ejercido por el life coach, dentro de este se puede trabajar en el coaching de vida o de proyecto de vida, coaching emocional, coaching espiritual, coaching con PNL (Programación Neurolingüística), incluso la vertiente ontológica se incluye dentro del coaching personal. El principal contenido de esta área de trabajo es ayudar al coachee a establecerse metas en la vida (objetivos personales) y crear un plan para alcanzarlas.
- Coaching relacional: en este están incluídos el coaching de habilidades sociales, coaching comunicacional, de reconocimiento social, coaching de pareja.
- Coaching profesional o laboral: aquí se encuentran las variantes de coaching ejecutivo, coaching de liderazgo, coaching de equipos, de emprendimiento, coaching organizacional, comercial, de habilidades profesionales, coaching empresarial, coaching coercitivo. Aquí también se trabajan con metas y planes; sin embargo, suele tratarse más de objetivos estratégicos y orientados a resultados profesionales tangibles y cuantificables. También se puede trabajar desde una cuestión vocacional hasta un objetivo económico- laboral, pero su versión más frecuente es la que nos encontraremos en procesos de coaching a empresas, donde es la empresa la que contrata el servicio dirigido a determinados trabajadores/as.
- Coaching corporal: aquí se puede tratar el coaching deportivo, coaching nutricional, estético, de salud, de lenguaje corporal.
Existen otras áreas de coaching; por ejemplo: coaching financiero, coaching educativo, coaching para coaches, coaching sistémico.
